Descripción
Este libro presenta un conjunto de competencias personales y profesionales para educar en valores y, sobre todo, ofrece toda una serie de ejercicios para entrenarlas. Para educar en valores necesitamos tener cierto desparpajo en siete competencias: ser uno mismo, reconocer al otro, facilitar el diálogo, regular la participación, trabajar en equipo, hacer escuela y trabajar en red. La obra, pues, parte de algunas ideas básicas: que la educación en valores es una ocupación esencial de los educadores y las educadoras, que para educar en valores es necesario dominar algunas competencias y que es posible mejorar el dominio de cada una de estas competencias con un poco de dedicación. La educación en valores es una tarea personal y un reto que compartimos con todo el profesorado: todos y todas educamos en valores.