Descripción
Este libro desafía al lector con un problema que preocupa a muchos profesores, padres e incluso empleadores, que tratan con el problema de aprendizaje lento, accionar lento o del pensar lento. El profesor que tiene que ayudar al alumno a superar los efectos negativos de su lentitud, los padres que se quejan constantemente acerca de la manera ineficiente con que responde el niño a las instrucciones, el empleador que siente que la productividad del trabajador no corresponde a las demandas del trabajo, todos ellos, cual más cual menos, se sienten confundidos en sus intentos para explicar este fenómeno y encontrar el camino adecuado para remediarlo. Más aún, cuando la gama de soluciones va desde obligar a la persona lenta a seguir a los más eficientes, hasta la oferta de diversas intervenciones de orden médica, psicológica, motivacional o de repetición mecánica, claro está, que estas soluciones no siempre son útiles.
El autor presenta, de una manera elaborada, el rol que juega la Evaluación Dinámica y el Programa de Enriquecimiento Instrumental (PEI) en la Experiencia de Aprendizaje Mediado (EAM), para la aclaración de los procesos que subyacen en el fenómeno de aprendizaje lento y los métodos más óptimos para iniciar un proceso mental.